Lunes 18 de abril de 2016.- Con éxito finalizó el quinto voluntariado de la Fundación Reforestemos Patagonia, en el que participaron por primera vez, de forma exclusiva, alumnos y profesores de la Escuela Rural Cerro Castillo.

Junto al embajador de la campaña, Polo Ramírez, los alumnos de la región de Aysén plantaron más de 2.000 árboles nativos – lengas- en un lugar seleccionado previamente con el apoyo y autorización de Conaf.

“Fue una experiencia increíble. Estoy muy feliz de haber participado y aportado un grano de arena al cuidado del medio ambiente. La organización y el grupo de gente que formamos fueron excelentes. Comparto fielmente la causa de la Fundación y el valor del respeto por nuestra Patagonia, así que estoy profundamente agradecido de haber podido ser parte de la actividad”, comentó Polo Ramírez.

La Directora Ejecutiva de Reforestemos Patagonia, Suzanne Wylie, agradeció la labor de los jóvenes de la localidad que participaron en la actividad. “Agradezco el alto interés y motivación de los alumnos y profesores que nos acompañaron en este plan de reforestación. Es primera vez que organizamos la actividad con gente de la comunidad local por lo que estamos muy felices con el resultado. Destaco la entrega de cada uno de los voluntarios por su gran compromiso con la causa y el cuidado del medio ambiente. Estamos muy felices y orgullosos del trabajo realizado que si bien fue intenso ha sido una experiencia única”.

El voluntariado, realizado gracias a al apoyo de la empresa Sugar Foods, se llevó a cabo desde el miércoles 13 hasta el viernes 15 de abril e incluyó actividades educativas como charlas de temas relacionados a nuestro patrimonio natural y el Huemul como especie en peligro de extinción.

Para el Jefe Provincial de Conaf Coyhaique, Marcelo Dörner, “parte de nuestra labor es cuidar nuestros bosques y rescatar el valor del respeto por nuestra naturaleza, por eso nos es importante acompañar a la fundación en su causa. Llevamos varios años trabajando juntos y ha sido muy provechoso ver los frutos de estos voluntariados y los trabajos de reforestación. Con la Fundación compartimos muchos valores y esperamos continuar nuestra alianza para crear aún más conciencia por el cuidado de nuestro medioambiente”.

En la misma línea, Marty Wilson, CEO de Sugar Foods, comentó que “creemos que cada paso que damos para reducir nuestra huella de carbono es en la dirección correcta.  Por eso estamos orgullosos de EcoStick, la nueva línea de endulzantes que es realmente responsable con el medio ambiente. A través de pequeños detalles generamos un impacto gigantesco en nuestros ecosistemas, por eso estamos muy contentos de poder contribuir a salvar árboles y ahora, a plantar otros a través de Reforestemos Patagonia”.

Reserva Nacional Cerro Castillo

La Reserva Nacional Cerro Castillo fue creada durante la década de los 70 para proteger los valiosos recursos forestales de esta boscosa zona ubicada a 80 Km. al sur de Coyhaique. Tiene una superficie de 180 mil hectáreas, las cuales albergan diversas especies nativas y endémicas de la región de Aysén.

Sugar Foods

Sugar Foods es una empresa con más de 65 años de experiencia en la industria de los alimentos. Su marca EcoStick es la nueva linea de endulzantes Responsable con el medio ambiente. Su moderno y elegante envase reduce la Huella de Carbono en un 50%, y contribuye a la reforestación de la Patagonia.

Fundación Reforestemos Patagonia

La iniciativa Reforestemos Patagonia nace después del último gran incendio ocurrido en el Parque Nacional Torres del Paine, en diciembre de 2011, el que destruyó más de 17 mil hectáreas. Se trata de un movimiento ciudadano que gestiona el apoyo público y privado para organizar iniciativas que contribuyan con el cuidado, la recuperación y valorización de la Patagonia Chilena, uno de los principales patrimonios naturales de nuestro país y del mundo.

Hasta el momento la iniciativa ha logrado reunir más de 320.000 árboles nativos, transformándose en la mayor campaña de reforestación nativa de Áreas Silvestres

Protegidas de la Patagonia Chilena. En una primera etapa, el objetivo es plantar 1 millón de árboles nativos –lengas, ñirres y coihues- en los Parques Nacionales Torres del Paine y Laguna San Rafael, y las Reservas Nacionales Lago Cerro Castillo y Lago Carlota, ubicados en las regiones de Aysén y Magallanes.