Los incendios forestales y sus efectos en el medio ambiente

Como país, nos encontramos frente a una realidad que no puede ser ignorada: la creciente amenaza de los incendios forestales. Este año, las predicciones meteorológicas apuntan hacia un escenario inquietante, con altas temperaturas que podrían superar los 40°C, vientos que rebasan los 70 km/h, y una humedad relativa alarmantemente inferior al 10%. Estos factores, conocidos como «Factor 40-70-10», no solo multiplican la velocidad de propagación de los incendios hasta tres veces, sino que también incrementan su capacidad destructiva hasta en cinco veces (CORMA).

Chile, un país que ya enfrenta una persistente sequía de 14 años consecutivos, con más del 50% de su territorio se ve afectado, y un preocupante 23% de áreas en estado de desertificación (CONAF). se posiciona en una situación de vulnerabilidad sin precedentes.

Aquí, nos proponemos abordar los efectos devastadores que los incendios forestales pueden tener en el medio ambiente, siendo la prevención una herramienta poderosa en nuestras manos, esencial para proteger nuestros valiosos ecosistemas, así como nuestras comunidades y la biodiversidad que nos rodea.

Ante un panorama tan desafiante, es fundamental entender la magnitud del problema y actuar de manera informada y responsable. Los incendios forestales no son solo un fenómeno natural, sino también un reflejo de nuestras acciones y decisiones.

Los incendios forestales y sus efectos en el medio ambiente según CONAF

Suelos:

Deterioro de las propiedades físicas del suelo, con la consiguiente disminución de su capacidad de absorción y retención de agua.
Cambio de las propiedades químicas del suelo, con pérdida de nutrientes.
Destrucción del estrato de materia orgánica no incorporado al suelo mineral y de los millones de microorganismos descomponedores que lo habitan.
Erosión de los suelos por exposición al viento y lluvia.

Agua y Cuencas Hidrográficas:

Incremento del escurrimiento superficial del agua lo que provoca alteración en los cursos de agua y en su ciclo natural.
Deterioro en la calidad del agua al arrastrar cenizas a las capas superficiales del suelo.
En el período de lluvias, crecidas de ríos por embancamiento con la consiguiente generación de inundaciones.

Vida Silvestre:

Destrucción de formaciones vegetales o alteraciones en la composición de las especies.
Migraciones de animales mayores, aves, insectos y microorganismos, o su destrucción.
Desequilibrios ecológicos o rupturas en la cadena biológica al cambiar el número de especies y su diversidad.
Fragmentación del bosque y con ello debilitamiento de los ecosistemas.

Aire y Atmósfera:

Alteraciones físicomecánicas de la atmósfera.
Incorporación de emisiones contaminantes.
Aumento del efecto invernadero.

Cambio Climático:

Los incendios provocan un aumento de los gases de efecto invernadero los cuales son los responsables del calentamiento global que ha ocasionado el cambio climático.
El cambio climático provoca episodios de sequías los cuales propician la ocurrencia y aumentan el efecto de los incendios forestales en estos territorios.

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