La Segunda: Columna "Manejo responsable de arbolado urbano"

Manejo responsable de arbolado urbano

«Durante los últimos años, hemos visto cómo el clima puede intensificarse de maneras inesperadas. Las fuertes lluvias y vientos recientes, que superaron lo esperado, provocaron la caída de muchos árboles, generando cortes prolongados de energía, daños en la infraestructura y accidentes, incluso fatales. Esta situación plantea la urgente necesidad de valorizar el  generar manejo del arbolado urbano en nuestras ciudades.

Los árboles urbanos ofrecen innumerables beneficios: mejoran la calidad del aire y la salud de las comunidades, regulan la temperatura, conservan la biodiversidad y embellecen nuestras ciudades. Sin embargo, sus ciclos de vida pueden verse acortados en ambientes urbanos debido a las condiciones estresantes, como el suelo compactado, la falta de agua, la contaminación y las podas mal realizadas -lo que genera el escenario perfecto para que entren patógenos a dañar la madera- junto a una incorrecta selección de especies.

Para manejar adecuadamente el arbolado urbano, es fundamental desarrollar una planificación que establezca directrices claras y acciones a implementar en los próximos años basadas en un catastro actualizado de los árboles existentes. Esto permitirá evaluar su estado, conservar los ejemplares sanos, apoyar el crecimiento adecuado de los más jóvenes y reemplazar aquellos en deterioro.

Por otra parte, la poda responsable es crucial para mantener la salud y la estabilidad de los árboles. El desmoche, una poda excesivamente agresiva comúnmente utilizada para proteger el cableado eléctrico, puede debilitar significativamente la salud de los árboles, haciéndolos más propensos a enfermedades y caídas.

Esta planificación también debe considerar la selección de especies para la ciudad, ya que algunas de ellas no son adecuadas debido a su vulnerabilidad a las caídas. Es fundamental seleccionar especies de bajo consumo hídrico, con mayor resiliencia al cambio climático y a la sequía, por eso los árboles nativos se convierten en la mejor alternativa al momento de crear una estrategia de arbolado urbano. Estas medidas no solo protegen a los árboles, sino que también mejoran la resiliencia de nuestras ciudades ante eventos climáticos extremos.

En Reforestemos, nos enfocamos en plantar especies nativas que se caracterizan por su fortaleza y adaptabilidad a estas nuevas condiciones ambientales, lo que también potencia la biodiversidad local, manteniendo la integridad ecológica de nuestros ecosistemas. Pero como ya lo advertimos, no debería tratarse solo de reforestar. La mantención tiene que ser igual de importante si es que buscamos resultados sostenibles en el tiempo. No podemos convertir a los árboles en un arma de doble filo, no puede tratarse de eso.

El manejo responsable del arbolado urbano es una necesidad crucial para la seguridad y calidad de vida de nuestras ciudades, especialmente considerando el gran déficit de áreas verdes en el país y los efectos evidentes del cambio climático. Es hora de adoptar una estrategia integral y sostenible que contemple tanto el bienestar de los árboles como la seguridad de la infraestructura y las personas».